La guerra comercial entre China y Estados Unidos vuelve a tensar los hilos del comercio internacional. A pesar de una prórroga de 90 días en la implementación de nuevos aranceles, la incertidumbre persiste: los gravámenes mutuos han superado el 100%, afectando directamente la dinámica del transporte marítimo.
Expertos de la industria, como Peter Sand (Xeneta) y Lars Jensen, coinciden en que el impacto no es menor. El tráfico de contenedores entre ambos países se ha reducido, y como consecuencia, las navieras comienzan a cancelar rutas o a redirigir sus servicios hacia otros países asiáticos, evitando escalas en puertos chinos. Este reajuste no solo complica la disponibilidad de espacio y equipos, sino que también incrementa la volatilidad en las tarifas spot, especialmente en rutas alternativas como Japón–EE.UU.
Los importadores, buscando proteger sus cadenas de suministro, están adelantando sus embarques desde países fuera de China, lo cual podría generar una presión adicional sobre la disponibilidad de contenedores y la capacidad portuaria en otras regiones. Para los operadores logísticos y los dueños de carga, la estrategia de “esperar y observar” ha cobrado valor en un escenario cada vez más impredecible.
Desde Fidum Logistics recomendamos mantenerse informados y contar con aliados estratégicos que permitan una reacción ágil ante estos cambios. La reconfiguración de las rutas marítimas es una realidad en curso, y adaptarse será clave para mantener la competitividad.

El comercio internacional vive un momento de transformación:
La tensión entre China y EE. UU., sumada al auge de la carga transfronteriza entre México y EE. UU., está reordenando rutas, reglas y prioridades en el transporte global.
Estos son los puntos clave que debes conocer:
🔸 Aranceles entre China y EE. UU. superan el 100%, provocando cancelaciones de rutas y omisiones portuarias.
🔸 Importadores buscan nuevos orígenes fuera de China, impulsando a países como Japón y México.
🔸 México se consolida como socio estratégico, con más del 80% de sus exportaciones dirigidas a EE. UU.
🔸 Nuevo Laredo moviliza hasta el 40% de la carga terrestre entre ambos países.
🔸 El T-MEC potencia la infraestructura fronteriza, pero también impone mayores requisitos regulatorios y laborales.
🔸 La escasez de equipos y contenedores ya es un nuevo reto para la logística global.